Fiesta de la Inmaculada Concepción de la Virgen María
Evangelio del Domingo
María, Madre de la Vida
María mujer de Fe
Debemos alegrarnos de que un ser humano, María, pueda enseñarnos el camino de promover la Gracia de Dios, que se concreta, en tantos valores, que Él, nos ha dado, a todos, como a María, para alcanzar la plenitud de la vida humana, promoviendo esa parte de divinidad que vive en nuestro interior. En María, descubrimos, cómo se dejó guiar por el Espíritu y cómo permaneció a su sombra,“ en las buenas y en las malas”, en la bonanza y en los tiempos difíciles.
¿Cómo fue posible, que María alcanzara esa plenitud de vida? Pues aprendamos: María, no puso ningún obstáculo a que la gracia de Dios recibida, se promoviera y desplegara, totalmente, en ella. No consideremos a María como una privilegiada. Lo único extraordinario, fue, su fidelidad y disponibilidad, su capacidad de entrega, su FIAT, su HÁGASE. Y eso, es lo que, hoy, celebramos: María, engrandecida por su respuesta a Dios. Lo que vemos y decimos de María, debemos descubrirlo y trabajarlo, en cada uno de nosotros.
Mujer llena de caridad