Del infierno al cielo
No son las palabras de los demás las que te envían al cielo o al infierno. Siempre tenemos que estar dispuestos a aprender incluso en las situaciones más inesperadas.
No son las palabras de los demás las que te envían al cielo o al infierno. Siempre tenemos que estar dispuestos a aprender incluso en las situaciones más inesperadas.