Ombretta y Ayoze, Carina, Cristian, Eva, Fuensanta y Pepe nos cuentan lo que ha significado para ellos este mes vivido en Camerún y compartido con las hermanas y la gente del lugar. Nadie como ellos para hacernos sentir la belleza de compartir la vida con otros.
Juntos han trabajado, orado, gozado y sufrido, quedándoles al final una gozosa sensación de que valió la pena.
Lee sus testimonios aquí