XVIII Asamblea de la CLAR
Si no dialogamos constantemente con la sensibilidad de las mujeres y de los hombres de hoy, corremos el riesgo de tener un tesoro y no poder ofrecerlo. Siempre hay una Palabra de Dios dicha para cada tiempo. Dios no se calla. Esto no pueden olvidarlo las religiosas y religiosos jamás.

La experiencia de 96 participantes en nuestra XVIII Asamblea de la CLAR –junto al encuentro directo con la Vida Religiosa ecuatoriana– fue en sí misma una manifestación de comunión trinitaria, de mutua donación, de dinamismo amorosamente fecundo.
Al finalizar la Asamblea, los participantes emitieron una comunicación que recoge lo esencial de los caminos de futuro para la Vida Religiosa de América Latina y el Caribe. Leer más